Antonio Garrigues Walker, presidente de honor del despacho Garrigues y Doctor Honoris Causa por la Universidad Europea, visita la Universidad con motivo del evento “Desayuno Canal CEO” y le entrevistamos para conocer en profundidad su opinión sobre el presente y el futuro de la abogacía, los retos de los futuros abogados y el papel de las universidades en la formación de los mismos.
P - ¿Cuál es el papel de la universidad en la formación de los abogados del futuro?
R - Estamos en una era de grandes avances tecnológicos y científicos, todos ellos con consecuencias jurídicas. Por ello, es esencial que los estudiantes de derecho estén al día de estos avances y conocer cómo pueden afectar en la vida, como por ejemplo la inteligencia artificial. El abogado del futuro tendrá que demostrar que la inteligencia artificial le ayuda en su profesión, pero él tiene que aportar un valor añadido de interpretación de datos, consejos estratégicos, etc. Por ello, la continua separación entre ciencias y letras es equivocada y tiene que desaparecer también en la universidad.
P - Otro de los retos actuales es la conciliación entre la globalización y la vuelta a los nacionalismos o a los aspectos locales, ¿cómo debemos educar a los estudiantes de derecho en este sentido?
R - Hay que educar de forma global y es necesario concienciar sobre la existencia de otras culturas jurídicas. La universidad tiene la obligación de hacer ver a los estudiantes que tienen que ser sensibles a ese proceso de universalización, de globalización e internacionalización en el que estamos envueltos. Además, la universidad debe enseñar a los estudiantes cómo se ejerce esta profesión, tanto en España como en el mundo.
P - Desde la Universidad Europea no sólo insistimos en los conocimientos, también en las capacidades, competencias y valores que queremos que adquieran nuestros estudiantes, ¿cuáles son las competencias y valores básicos en el ejercicio de la abogacía?
R – Hay que destacar el conocimiento de idiomas y no solamente del inglés, que hoy en día es una lengua franca, también del chino, del japonés o del árabe, pues esto le ayudará al futuro abogado a tener mayor capacidad de acción y una mentalidad abierta. Además, hoy en día la globalización es una realidad, por lo que hay que tener en cuenta otros sistemas jurídicos y conocerlos para entender mejor los problemas y tener en cuenta otras opciones. Por último, los estudiantes tienen que trabajar por reafirmar sus “valores intrínsecos” (empatía, conocimiento del entorno digital, etc.) y no olvidar nunca la ética como fundamento para ser sostenible, rentable y feliz.
Como punto final a la entrevista, Antonio Garrigues ha destacado el gran honor y privilegio que le supone ser Doctor Honoris Causa de la Universidad Europea y ha agradecido el ambiente idílico y alegre que se disfruta en esta Universidad.